Mirada


En la última entrada que realicé, os comentaba la exposición que hice este pasado mes de julio en Fuentesaúco. Deciros que ha sido toda una sorpresa la acogida y el reconocimiento que he recibido de todos los que habéis acudido a verla. Una grata sorpresa que me hace pensar que todo el esfuerzo merece la pena.
Quiero agradecer a la junta directiva de LOS GRUPOS ACTIVOS, del 2017, la oportunidad que me ha brindado para mostrar mi trabajo y sobre todo a aquellos que habéis visitado y os han gustado mis fotos. Gracias.
Para continuar con esta afición, que en ocasiones uno no puede desempeñar como quisiera, pero que no desea abandonar, os muestro un ave que en el blog no está representada y que tenía ganas de fotografiar. Se trata del Alimoche. Las realicè la pasada primavera, espero que os gusten.
Un saludo.

EL ALIMOCHE no pone reparos en engullir excrementos y restos animales, y su predilección por los cadáveres es muy acusada: los despedaza y limpia el esqueleto hasta el último jirón de carne.
Pariente de los buitres, a los que apenas se parece, en vuelo recuerda levemente, sin embargo, a la Cigüeña Común, a causa de la disposición de las marcas blancas y negras de sus alas.
Al contrario de las aves jóvenes, que suelen permanecer en sus cuarteles de invierno, los adultos comienzan a llegar a España a finales de febrero y durante el mes de marzo, dedicándose intensamente a la búsqueda de un emplazamiento para el nido, a veces el mismo de años anteriores.
Tras la cría de los pollos, que abandonan el nido en agosto, empieza el viaje de retorno a los países africanos situados al otro lado del desierto del Sahara. Los jóvenes, muy manchados y de tono pardo oscuro, se distinguen perfectamente de los adultos, y, tras este primer viaje, permanecerán en África varios años, generalmente hasta alcanzar la madurez reproductora; entonces regresarán a sus países de origen.

Identificación: Cuerpo blanco-amarillento; parte posterior de las alas negra; cara y mejillas desnudas y amarillas; pico amarillo con punta negra; patas amarillas o grises; jóvenes pardo oscuro por completo, manchados de leonado; parte desnuda de la cabeza, gris claro.
Nidificación: Nido en cornisa o en cavidad de pared rocosa; montón de ramitas forrado de papel, trapos, lana, etc.; puesta, marzo-abril, 2 huevos blancos manchados de pardo; incubación, por ambos padres, de unos 40 días; comienza al poner el primer huevo; los pollos vuelan tras unos 75 días.
Alimentación: Excrementos, detritos, cadáveres, roedores, reptiles, batracios, crustáceos, moluscos e insectos; también huevos de otras aves.
Hábitats: Montañas y riscos.
 






4 Amigos dejaron su comentario.

  1. Buena serie del alimoche, con fotos muy variadas Santi

  2. Muchas gracias Javier, me alegra que te gusten.
    Un fuerte abrazo.

  3. Que buenas, Santi!! Me quedo con la que está posado en la rama, me encanta.
    A ver si tengo un ratillo y te mando un correo con lo que me pediste.
    Saludos.

  4. Gracias por pasarte Uge, cuando tengas un ratito y te acuerdes.
    Un fuerte abrazo.

Con tus comentarios aprendemos todos, no te cortes, dime lo que opinas de mis fotos.